Tom Kaulitz ha firmado recientemente un contrato publicitario con la empresa Reebok. El guitarrista se embolsará unas buenas perrillas y la casa de calzado y ropa deportiva, podrá contar con la imagen desenfadada y cool de uno de los veinteañeros con mejor tarjeta de presentación a nivel internacional.
Reebok tendrá mucha idea y experiencia a la hora de generar campañas publicitarias y de hacer creer a los posibles compradores de los mágicos poderes que pueden tener tus pies al llevar unas determinadas zapatillas de deporte; pero con el concurso que han creado en colaboración con VIVA, y en el que se ofrece la posibilidad de conocer de cerca a Tom, al grupo, compartir TourBus y demás actividades de ensueño; la han cagado de una manera muy digna.
En qué cabeza cabe, realizar tal concurso, y limitar la participación a los residentes de paises de habla germana. Hacía tiempo que no se leía semejante tropelía y cuesta creer, que el Management del grupo consienta que la imagen de la banda tome parte en una tomadura de pelo similar.
Si a la hora de vender CDs, DVDs o entradas para los conciertos a nadie le importa un bledo el idioma del consumidor, ¿por qué hay que mirar el DNI del Fan a la hora de participar en un concurso? ¿Qué sentido tiene que las bases del concurso invadan toda la blogosfera si después sólo pueden participar unos cuantos?
Sres de Reebok, métanse el concurso dónde les quepa, que a buen seguro, sitio tienen.
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